Cultivo Interior

Usos de las bombillas bajo consumo [CFL]

Llegada la época de menos horas de luz del año os explicamos el uso de la iluminación para cultivar marihuana en interior. En esta época del año (invierno) las plantas entran en un parón vegetativo y aunque la planta de cannabis es de gran dureza no es recomendable plantar en esta época del año de mínimo horario de luz solar y bajas temperaturas.

Las lámparas fluorescentes compactas (CFL) son conocidas también por el seudónimo de “bajo consumo” y destacan por su duración, rendimiento y facilidad de uso. Dónde más se utilizan es en la germinación de semillas, mantenimiento de plantas madres y para enraizamiento de esquejes (grow) También existen modelos de ciclo completo (mixta) y especificas para el ciclo de floración (bloom)

Una gran ventaja de estas lámparas es que no producen calor y no dan los problemas de las bombillas HPS.

Para germinar semillas o enraizar esquejes no necesitamos gran cantidad de luz aunque si habrá que «engañarlas» con un horario de luz similar al de primavera época de máximo desarrollo (donde el día es mas largo que la noche) con un color de luz similar (blanco/azul) y mantener unas condiciones óptimas de temperatura y humedad. La semillas y esquejes en los primeros días necesitan unos 23/25ºC de temperatura y una húmeda constante ( sin excesos) en el sustrato y ambiente en torno al 70-80% . El mejor horario de luz son 18 horas de luz y 6 de oscuridad que es el idóneo para se desarrollar las plántulas en las primeros semanas.

Siempre que el horario de luz sea mayor que el de NO luz, es periodo de crecimiento para el cannabis y cuanto mayor sea el horario de luz y la potencia de esta, más rápido y frondosas se desarrollara las plantas.

Se recomienda su utilización en crecimiento y dependiendo de la potencia y lúmenes (=cantidad de luz asimilable) así se desarrollan las plantas. Unos tubos de 38 ó 56 Vatios son suficiente para hacer germinar unas semillas o enraizar unos esquejes pero son insuficientes a partir de la 3ª semana pues las plántas ya abran desarrollado el 3-4 par de hojas y no cubrirán más de 3 o 4 macetas pequeñas. Pensar hacer el crecimiento de varias plantas sin la luz apropiada es imposible y pronto aparecerán los primeros síntomas de debilidad por falta de luz.

Hay es donde se han impuesto las nuevas lámparas compactas CFL. Son como los fluorescentes pero con los tubos en espiral para aumentar su reflexión de luz en el reflector y con arrancadores electrónicos frente a las antiguas reactancias que usan los tubos fluorescentes. Todos tenemos alguna de estas lamparas ya en casa aunque de menos potencia. Surgieron al mundo de la horticultura para el tema de viveros e invernaderos de flores, pero como siempre nuestra cannabis se beneficia de todo lo bueno para otros muchos usos.

Hay varias potencia y generalmente las de uso para cultivos de cannabis parten de los 125W. Hay versiones de  125, 150, 200 y 250 vatios dependiendo de marcas y modelos.

Existe tres Temperaturas de Color (=color de la luz) recomendables:
6400ºK  (Grow) para el crecimiento de semillas, enraizamiento de esquejes y mantenimiento de plantas madres.
2700ºK (Bloom) para apoyo de las lámparas de alta presión usadas para floración. Su uso en mini-cultivos también es útil, aunque no se puede esperar una gran cosecha de una única bombilla pues las plantas necesitan bastante intensidad lumínica para producir flores y resina en cantidad.
 2700ºK-6400ºK (Greenpower) mezcla de los dos colores anteriores, que es la que se utiliza para cultivos de ciclo completo de crecimiento y floración.

Su duración es otro de sus puntos fuertes ya que se garantizan unas 8000 horas de uso.

En mi caso utilizo una de estas bombillas de crecimiento de 200W para germinar y mantener genética durante todo el año, pues si en invierno la utilizo para crecer semillas gastando la mitad de la energía necesaria para otro tipo de lámparas y en verano me sirve para mantener la genética en un pequeño armario sin tener problemas de calor.

Para elegir la lámpara de crecimiento óptima lo primero hay que mirar la superficie a cubrir, dependiendo del numero de plantas madres, semillas o esquejes que necesitemos. Para un armario de propagacion de 60x40x60cm
para mantener una madre y tener esquejes para un armario de cultivo de 120×120 será suficiente con 125W.

También tiene una utilidad que es crecer todo el año en interior con estas lamparas y sacar las plantas a florecer al exterior. Al sacar las plantas de un horario de 18 horas a uno de menos horas de luz se inducen a florecer a las plantas. Hay cultivadores que sacan tres cosechas al año con solo una lampara compacta y un poco de dedicación en un sitio  con 6 horas de luz directa del sol en zonas de  clima templado.

Recordamos que para poder florecer una planta correctamente y cosechar marihuana de calidad es imprescindible una potencia suficiente durante de luz durante la época de fructificación y floración y que estas lámparas son más útiles durante el crecimiento por si solas y que valen de acompañamiento a las de alta presión de sodio que son las más recomendadas para floración, aunque ya hay cultivadores que sacan sus pequeños cultivos con una luz compacta de bajo consumo con espectro de floración.

Suerte, paz y amor … y enciende tu luz interior!!