Bolas especiales que evitan la salida de olores de cualquier material que haya dentro.
Una vez abiertas, se pueden sellar aplicando calor con una plancha, mechero o máquinas de sallado al vacio, quedando cerradas herméticamente.
Para abrir de nuevo sólo hay que cortar la zona sellada, por lo que estas bolsas son reutilizables.
No deja que olores escapen hacia el exterior y que contaminaciones de cualquier tipo penetran su interior.
Volumen : 1kg aprox.